El V10 vuelve a la conversación: ¿Será realidad?

La FIA ya lo está valorando como una opción e incluso estaría pensando dejar de lado el reglamento de 2026 para ello. Aun así, Audi y Fernando Alonso se oponen.
En medio de una etapa de cambios para la categoría reina, hay un nuevo factor que sale a pista. El nuevo reglamento, previsto para 2026 no está del todo concretado, ya que recientemente han surgido nuevas posibilidades.
Una de las que suena con más fuerza es la del motor V10, que fue la regla general desde 1989 hasta 2005. Durante este tiempo, el motor fue uno de los más potentes. Además, es recordado como un motor que marcó una de las épocas más conocidas en la F1. Aun así, al año siguiente, cuando se vio reemplazado por el V8, que apenas duró 8 años en la categoría. Ahora, con el V6 turbo-híbrido, la FIA replantea el camino a seguir a menos de 1 año del cambio de regulaciones.
El causante: Ben Sulayem

El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, ha vuelto a estar en el centro de la polémica relacionada con la categoría reina. El 21 de febrero dio a conocer en Instagram en el que mencionaba los debates que había entorno al motor.
En este mismo mensaje explicaba que se estaban explorando diversas opciones. Según Ben Sulayem, el mundo del motor tenía que «explorar varias opciones». Ahí, dejó caer la opción del motor V10, mencionando que podían estar impulsados por combustibles sostenibles.
Tombazis propone un camino a seguir

Desde entonces, las discusiones en la organización se han intensificado. Nikolas Tombazis, director de monoplazas, confirmó en el GP de China, que «no hay ninguna propuesta sobre la mesa». Aun así, un cambio en la fórmula del motor aún tiene cabida en el futuro.
El ex ingeniero de Ferrari proponía «motores más simples», entiendendo que los motores actuales son muy caros. Esto se suma al avance en combustibles sostenibles y al camino que debe seguir la categoría. El propio Tombazis lo planteó del siguiente modo en una entrevista:
«Creo que la mejor manera de abordarlo es: ¿queremos tres o cuatro años más tarde cambiar a un tipo de motor diferente? Esa es la pregunta número uno. Eso se centra en el futuro del deporte. Si la respuesta es sí, entonces surge la segunda pregunta: ¿qué haremos en el periodo intermedio? Esta es, sin duda, una cuestión secundaria en comparación con la principal.»
Nikolas Tombazis, Motorsport
En esa misma entrevista, el griego afirmó que todos los debates están en fase inicial. Aun así, la FIA está hablando con los fabricantes de unidades de potencia para barajar diversas opciones. A pesar de que para algunos «todo esté decidido», Tombazis deja abierto el debate para abrir nuevos caminos en la Fórmula 1.
Mientras tanto, batalla en el paddock

Entre tantas decisiones e incertidumbre, algunos pilotos ya se han pronunciado al respecto. Algunos, como Fernando Alonso, se posicionan en contra. A pesar de que según él «adoraba el sonido de los V10 y de los V8», pero recuerda la eficiencia de los motores actuales. El asturiano delegó esa decisión a la FIA, a pesar de que recuerda sobre la eficiencia de este tipo de motores.
En este mismo bando está Audi. La futura escudería de Fórmula 1 se muestra tajante al respecto. Afirma que aceptaron entrar al Gran Circo por la nueva normativa. Por lo tanto, no tendrían sobre la mesa trabajar en un motor V10.
Con una posición contraria se muestran Max Verstappen o Lewis Hamilton. El piloto neerlandés afirmó en una entrevista que aunque en aquella época los monoplazas eran más lentos, la sensación era distinta. A pesar de que delegue esa decisión a la FIA al igual que Alonso, ha opinado que ese motor es mucho mejor que el actual. Incluso, llegó a explicar que la vuelta de los motores V10 le harían quedarse más tiempo en Fórmula 1.
Mientras tanto, Lewis Hamilton también tira de recuerdos de su infancia para apoyar este motor. El sonido que producían aquellas unidades de potencia era para el británico mucho mejor que el de ahora. Además, apuesta por los combustibles sostenibles para su retorno.
Lo cierto, es que el V10 no ha dejado indiferente a nadie. Su posible vuelta deja dividido al mundo del motor y deja claro que habrá debate en los próximos años. De momento, solo es una idea, aunque con la incertidumbre de la nueva normativa, será uno de los protagonistas en este periodo de cambios.